El 17 de diciembre, la Autoridad Independiente en materia de Corrupción de Castilla y León (AICCyL) participó en el Seminario sobre la Protección del Alertador, organizado por el Centro de Investigación de la Gobernanza Global de la Universidad de Salamanca, conmemorando el Día Internacional contra la Corrupción. En este evento, se debatieron avances normativos, retos y aspectos institucionales relacionados con la protección de los informantes, en el marco de la Ley 2/2023, de 20 de febrero, y la Directiva Europea 2019/1937.
Durante la apertura, el entonces gestor de la Universidad de Salamanca, Ricardo López Fernández, destacó la importancia de estas actividades académicas para fomentar una cultura de integridad vinculada a la protección de los alertadores.
Luis García Romero, titular de la AICCyL, intervino en la primera mesa redonda, presidida por Javier Sánchez Bernal, profesor de Derecho Penal de la Universidad de Salamanca. En esta mesa participaron también Marta Blázquez Expósito, directora adjunta de la Oficina Andaluza contra el Fraude y la Corrupción, y Emmanuel Jiménez Franco, profesor de Derecho Administrativo de la misma universidad.
En su intervención, García Romero presentó la estructura normativa y las funciones de la AICCyL, haciendo énfasis en los recursos disponibles para gestionar denuncias, el ámbito subjetivo de actuación de la Autoridad, definido en la Ley 4/2024, de 9 de mayo, de medidas tributarias, financieras y administrativas, y la importancia del servicio de prevención y formación para fomentar una cultura de integridad y luchar contra la corrupción.
Durante esta primera mesa redonda, Blázquez Expósito, directora adjunta de la Oficina Andaluza Antifraude, explicó el trabajo de esta oficina autonómica, centrado en gestionar denuncias, proteger a las personas informantes y, además, prevenir malas prácticas que, aunque no constituyan delitos, pueden derivar en corrupción grave. Destacó iniciativas como el acompañamiento y asesoramiento a entidades locales en la implementación de canales de denuncia y programas de integridad. Además, reforzó la relevancia del enfoque preventivo, alineado con los modelos anticorrupción de la OCDE, para promover un cambio cultural sostenido.
La prevención de la corrupción y el fomento de la integridad también fueron temas centrales en la segunda mesa redonda. La AICCyL aprovechó este espacio para enriquecerse con experiencias como el proyecto piloto de certificación en integridad, presentado por García Bernárdez, responsable de la asesoría de análisis y relaciones institucionales de la Oficina Andaluza Antifraude, la propuesta de plan estadístico del investigador Fernández Ajenjo y el análisis multidisciplinar e internacional de la corrupción, realizado por Rodríguez García, director del Centro de Investigación para la Gobernanza Global y profesor de la Universidad de Salamanca.
El seminario subrayó que la lucha contra la corrupción y la protección de los alertadores requieren un enfoque multidisciplinar, supranacional y colaborativo. Asimismo, se enfatizó la necesidad de formar una cultura de integridad y garantizar mecanismos efectivos de protección para los informantes.